Si supieras lo difícil que fue oírte llorar y no tener una palabra censata para calmar tu dolor. Si supieras que daría mi vida por poder cambiar el curso de las cosas, por corregir mis errores, por dejar de recordarte y extrañarte con tanto dolor y dar las gracias por la felicidad que me provocó tu amor durante tanto tiempo. Tantas veces escuché pronunciar un "siempre voy a estar" y ahora no estas, ahora no hay nadie.. Ahora que te necesito. A veces cometes el error de creer ciegamente en lo que te dicen, pero llega un momento en que te chocas con la realidad.. Ya sea para bien o para mal. Hoy cambiaste de rumbo el destino. Y entonces sólo lo acepto.. A quién no le ha pasado?. Confías en eso de "para siempre" pero cuesta comprender que nada es eterno, que todo tiene su fin en algún momento, y mientras mayor capacidad se tenga de comprender y aceptar eso, más fácil se hace decir adíos. Y la careta es "Me da igual", "Estoy bien", "Yo sigo mi vida", "Nunca lo quise".. Pero en silencio, en esos silencios te diste cuenta de cuánto lo sigues extrañando, de cuánto lo necesitas para seguir tu vida todos los días aún.. de cuánto lo amas, de cúanto te importa. Lo único que se te viene a la mente es "No me sirve, no te sirve, no nos sirve. Dejemos de confundir las cosas, terminemos de una buena vez con este juego que sin querer puede terminar con este amor". Y es realmente así? Generalmente uno mismo se pregunta "Qué es lo que falla? Por qué no resulta?". Yo tengo la respuesta: a veces te aferras tanto a una idea o a una persona, que ese alguien se vuelve tu TODO, y lo escuchas y creas mil cuentos de fantasías donde siempre él es el protagonista, donde siempre él es quien te toma de la mano y te cuida, donde él es la única persona que te ama de verdad. Pero cuál es el problema? Cuando esa persona se intenta separar de vos, cuando esa persona sufre, cuando a esa persona le pasa algo malo, o pasa algo que te afecte a vos también, crees que tu mundo se viene abajo, y que la culpa de todo la tenés vos mismo. Y no es así, el amor se hace de a dos. Muchas veces, cuando una persona se despide, no lo hace del todo. Una despedida es necesaria para volver a reencontrarse. Y un reencuentro, es algo inevitable si dos personas se quieren de verdad..
Hace 1 año